La filosofía de este yoga es: "Añade a tu vida lo que le falta". No le quites nada, no te vayas a otro sitio, no busques lo fabuloso... Simplemente añade lo que le falta.
¿Qué le falta? ¿Un poco de paz? Añádesela.
¿Qué le falta? ¿Un poco de vitalidad? Añádesela.
¿Qué le falta? ¿Un poco de ejercicio? Añádeselo.
¿Qué le falta? ¿Un poco de flexibilidad? Añádesela.
¿Qué le falta? ¿Un poco de concentración? Añádesela.
¿Qué le falta? ¿Un poco de sentido? Añádeselo.
Este es un yoga para personas normales; no hay que hacer contorsionismo ni posturas raras; no hay que doblarse como un faquir o un gimnasta de élite; no hay que aguantar la respiración cinco minutos; no hay que poner cara de iluminado ni de místico. Simplemente es añadir ese pequeño toque para que en tu vida haya un poco más de paz, de vitalidad, de flexibilidad, de concentración, de optimismo, de buen humor y de sentido.
¿Qué puede hacer el yoga por ti? Muchas cosas en pequeñas cantidades, en su justa medida.
¿Cuántas horas dedicas al día a trabajar, a atender a los demás, a cosas insustanciales? ¿Cuántas horas al día dedicas para ti? Perdón, quería decir minutos... Sí, el día tiene 24 horas pero apenas hallamos tiempo para nosotros mismos. El Yoga te invita a dedicar un tiempo para ti, a invertir un tiempo en ti para una mayor calidad de vida.
¿Estoy estresado, no tengo tiempo, no tengo dinero? Querer es poder, y quien bien se quiere dedica unos minutos al día para sí mismo.